Acaba el año

En unas horas me toca largo viaje a casa con previo paso por Molins de Rei. Toca despedir el año fuera de Euskadi y con la familia, pero antes y durante la navidad, incluso, toca un poco más de waterpolo (como no...).
Termina un año positivo dónde puedo seguir dando gracias por trabajar de lo que más me gusta y apasiona. Contento por las oportunidades que se me han brindado éste año, algunas inesperadas y sorprendentes. Experiencias de vida.
Satisfecho del día a día en mi club, la verdad es que curramos mucho y los resultados salen. Se lo han ganado los jugadores. Y es que no había caído, hoy pensé un rato en ello... Pensé en eso de lo que siempre hablo y que para mí es el patrimonio de cualquier club, sus categorías base. La nuestra goza de una salud excelente y es que alevines, infantiles, cadetes y juveniles SIGUEN aún invictos. Meritorio es. Y si, son categorías de formación, pero son referencias que debemos fijarnos. La estructura del club debe estar bien formada y cuánto más sólida mejor. Destacar también el 3er lugar que ocupa el absoluto B colocado en puestos que dan derecho a la fase, jóvenes currantes que están dando el callo. Qué sigan.
Otro cantar es el nacional, luchando con los de casa muchos de ellos debutantes, pasando por un cambio generacional que está llegando sin avisar y demostrando un gran nivel de juego. Mérito lo de éstos chicos que nunca dejarán de sorprenderme. Estamos bien y estaremos geniales.
Saludos a todos.